La viejas campanas de San Lázaro estrenan sonido
Ermita de San Lázaro
El proceso de restauración ha incluido la construcción de unos robustos yugos de madera. También se han mecanizado los volteos, pues hasta ahora eran solo de bandeo y se accionaban manualmente desde la sacristía.
La ermita trujillana posee en su espadaña dos campanas. La más grande está dedicada al apóstol Santiago y fue fundida en 1883 siendo párroco arcipreste Pedro Trancón. Posiblemente, ocupó la espadaña de la iglesia de Santiago y fue donada a la ermita cuando aquella quedó sin culto ordinario. De la campana pequeña se desconoce su origen, pues no tiene ninguna inscripción.
Paco Murillo, fiel guardián del Señor de la Salud, posa orgulloso y emocionado ante la campana denominada "Santiago" y que reluce flamante después de su restauración.
La empresa encargada de llevar a cabo la restauración ha sido “Campanas Rivera”, casa fundada en el siglo XIX que opera en la localidad cacereña de Montehermoso. Esta empresa ha restaurado también dos campanas del campanario de San Martín, en la que, además, de instalar el esquilón que se encuentra en la espadaña de la sacristía del templo, añadieron una campana de menor tamaño que lleva el nombre de “Santísimo Sacramento”.
Su sonido se puede escuchar todos los días mientras se celebra la santa misa, justo en el momento de la consagración. Este esquilón, ha sido una de las muchas donaciones de José María Pérez de Herrasti a la parroquia.
A día de hoy, se están haciendo dos nuevas campanas que se instalarán próximamente en San Martín. La grande está dedicada al patrón de la iglesia y la pequeña (fundida de otra que se rompió) dedicada a la Virgen de la Victoria, patrona de Trujillo.
La ermita trujillana posee en su espadaña dos campanas. La más grande está dedicada al apóstol Santiago y fue fundida en 1883 siendo párroco arcipreste Pedro Trancón. Posiblemente, ocupó la espadaña de la iglesia de Santiago y fue donada a la ermita cuando aquella quedó sin culto ordinario. De la campana pequeña se desconoce su origen, pues no tiene ninguna inscripción.
Paco Murillo, fiel guardián del Señor de la Salud, posa orgulloso y emocionado ante la campana denominada "Santiago" y que reluce flamante después de su restauración.La empresa encargada de llevar a cabo la restauración ha sido “Campanas Rivera”, casa fundada en el siglo XIX que opera en la localidad cacereña de Montehermoso. Esta empresa ha restaurado también dos campanas del campanario de San Martín, en la que, además, de instalar el esquilón que se encuentra en la espadaña de la sacristía del templo, añadieron una campana de menor tamaño que lleva el nombre de “Santísimo Sacramento”.
Su sonido se puede escuchar todos los días mientras se celebra la santa misa, justo en el momento de la consagración. Este esquilón, ha sido una de las muchas donaciones de José María Pérez de Herrasti a la parroquia.
A día de hoy, se están haciendo dos nuevas campanas que se instalarán próximamente en San Martín. La grande está dedicada al patrón de la iglesia y la pequeña (fundida de otra que se rompió) dedicada a la Virgen de la Victoria, patrona de Trujillo.
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